2. Residuos generados por el huracán Otis y su manejo durante la contingencia en Acapulco

2.1. Resumen

Ante la devastación provocada por el paso del huracán Otis en la ciudad de Acapulco, Guerrero, México, se observaron problemáticas importantes que deben ser atendidas por su relevancia ambiental, social y económica; el manejo y la gestión de los residuos generados por el huracán, son considerados problemas emergentes que deben ser atendidos inmediatamente. El objetivo de la presente investigación fue analizar el manejo y la gestión de los residuos sólidos urbanos con la finalidad de dar cuenta de las estrategias metodológicas que implementaron las autoridades correspondientes para dar solución a este problema. Se utilizó una metodología cualitativa y analítica descriptiva con técnicas como la observación participante y el análisis de datos; se utilizó una lista de cotejo y una bitácora como instrumentos de recolección de datos. Los datos obtenidos fueron ponderados subjetivamente a partir de la opinión de expertos y fuentes oficiales. Los resultados mostraron que las autoridades fueron altamente rebasadas ante la desorbitante cantidad de residuos que se generaron en el transcurso de las primeras semanas de la contingencia y que se prolongó durante más de tres meses. Los residuos se mezclaron, lo que no permitió la separación para su uso, reutilización o compostaje y generó otros problemas de salud pública con brotes de infecciones respiratorias y enfermedades gastrointestinales. El gobierno del estado de Guerrero dividió el municipio de Acapulco en 14 zonas específicas; seis zonas le correspondieron al gobierno del estado y las ocho restantes al municipio de Acapulco. El manejo de los residuos sólidos urbanos y su disposición final ha sido un tema de debate y discusión por los expertos en el tema. El problema con el manejo de los residuos ya existía antes del huracán, lo que vino a exacerbarlo con su llegada. Las acciones observadas sobre la gestión de residuos a partir del fenómeno hidrometeorológico que se vivió en Acapulco fueron inadecuadas e inapropiadas.

Palabras clave: indicadores, desastres, huracanes, resiliencia, residuos sólidos urbanos.

2.2. Introducción

Las zonas costeras son consideradas áreas de mayor vulnerabilidad ante los fenómenos naturales, como un huracán, sobre todo en las poblaciones que no cuentan con una buena planificación urbana; en escenarios de sucesos naturales, las problemáticas que traen consigo estos eventos son dramáticas por sus diversas consecuencias.

En este sentido, los acontecimientos naturales afectan de diferentes maneras los sistemas de manejo de residuos sólidos urbanos, debido a que se afecta la eficiencia de la recolecta oportuna. La Organización Mundial de la Salud ha reconocido que si en situaciones normales el manejo de residuos sólidos es ineficiente, en situaciones de catástrofes el servicio de recolección es francamente deficiente.

Los desastres socioambientales son generadores de una enorme cantidad de residuos, mientras se encuentren dispersos en las calles y en depósitos no controlados. Son considerados una amenaza para la salud pública; los riesgos para la salud surgen al tener contacto directo las personas con los residuos acumulados en las calles, con desechos peligros como plaguicidas, aceites o solventes e indirectamente con vectores como moscas, mosquitos, cucarachas y roedores.

Los residuos provenientes de un desastre implican una mayor carga sobre las comunidades o las poblaciones afectadas, debido a que no sólo tienen que enfrentar la catástrofe en sí, sino que deben atender la problemática de la generación de los residuos. Así que los impactos ambientales están estrechamente relacionados con los impactos humanos, debido a que no sólo se afecta al ecosistema natural, sino también se impide la oportuna reconstrucción de los espacios colapsados debido a la obstrucción física.

Sin duda, el fenómeno hidrometeorológico que se presentó el 24 de octubre de 2023 rebasó todas las expectativas y todos los protocolos que se tenían para enfrentar el fenómeno, como consecuencia de la magnitud del huracán que alcanzó el nivel 5 en la escala máxima de vientos de Saffir-Simpson (noaa, 2024). En este sentido, la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (ocha, por sus siglas en inglés) (2011) considera que la manipulación, remoción y manejo seguro de los residuos ante el desastre son muy importantes para la recuperación de la población afectada.

En el caso de Acapulco, como en el de muchas ciudades del país, existe deficiencia en el sistema de recolección de los residuos sólidos urbanos (rsu). Esto es consecuencia de la escasa cobertura de este servicio para satisfacer las necesidades de la población, lo que lo hace un sistema poco eficiente. En este contexto, la llegada del huracán Otis resaltó las deficiencias que ya existían, lo que evidentemente se reflejó en los impactos adversos ambientales, sociales y sanitarios, la excesiva cantidad de rsu que se generaron y su inadecuado manejo.

El objetivo de la presente investigación fue analizar el manejo y la gestión de los residuos sólidos urbanos después del paso del huracán Otis en la ciudad de Acapulco, Guerrero, México.

2.3. Metodología

2.3.1. Área de estudio

La ciudad y puerto de Acapulco, Guerrero, México, se encuentra ubicada entre los paralelos 16° 41′ y 17° 14′ de latitud norte; los meridianos 99° 28′ y 101° 00′ de longitud oeste; con una superficie territorial de 1 882.6 km² (Ayuntamiento de Acapulco, 2021).

La metodología que se utilizó para esta investigación fue cualitativa, por su alcance, y analítica descriptiva (Guevara et al., 2020). Se eligió esta metodología porque se trató de dar cuenta del fenómeno social y ambiental que representó el huracán Otis. De esta forma, para ofrecer una visión más profunda sobre el tema, se optó por la técnica de observación participante (Colmenares, 2012).

Con base en metodologías referentes a la gestión de residuos sólidos en situaciones de desastre de la Organización Panamericana de la Salud (2003), se utilizó un sistema de indicadores para determinar el manejo que se le dio a los rsu diseñado por Martínez (2018). Estos indicadores fueron los siguientes: a) generación de residuos sólidos urbanos, b) falta de cobertura de recolección, c) eficiencia de los camiones recolectores, d) disposición final de los rsu. Se utilizó una bitácora como instrumento de recolección de datos. Estos datos fueron ponderados subjetivamente a partir de la opinión de expertos y fuentes oficiales.

La presente investigación inició en noviembre de 2023 y concluyó en enero de 2024.

2.4. Resultados y discusión

Mucho se ha dicho sobre la enorme cantidad de residuos que generó el paso del huracán Otis. Distintos funcionarios del gobierno han reconocido que esta problemática rebasó por mucho al gobierno. Refieren que este fenómeno generó en dos horas la cantidad de residuos que se genera normalmente en dos años; desde luego que así fue. Los residuos arrojados por el huracán Otis constituyen un fenómeno sin precedentes. En un inicio se observaron residuos provenientes de la destrucción de la vegetación que el huracán destrozó a su paso; los de ventanas y aparadores de vidrio, así como de una gran cantidad de techos de lámina galvanizada y de los anuncios y espectaculares destruidos y arrancados de sus cimientos, además de toda clase de muebles y enseres domésticos que fueron extraídos de las casas o los departamentos por los fuertes vientos, así como de vehículos sepultados bajo el lodo, ramas, árboles caídos y algunas bardas y techos de concreto, que también formaron parte del escenario el 25 de octubre de 2023 por la mañana.

Conforme transcurrían los días se pudo ver cómo se fue transformando Acapulco. Pasó de verse como una zona de guerra por la destrucción, a lucir como un enorme basurero. ¿Cómo fue posible que sucediera esto y que ni las autoridades correspondientes, ni los grupos de ambientalistas que existen en Acapulco, ni la sociedad civil, tomaran la iniciativa para no permitir la revoltura de desechos? No es lo mismo el tratamiento de los residuos verdes limpios, que pueden someterse a compostaje, que cuando se encuentran contaminados con otro tipo de residuos. Es prácticamente imposible una separación de residuos en estas condiciones de revoltura.

Los primeros recorridos que realizamos nos permitieron observar una gran cantidad de árboles caídos que obstruían las vialidades de la ciudad, así como una enorme cantidad de lámina galvanizada que el viento desprendió de los techos de las viviendas; vidrios, postes de luz y de teléfono tirados en medio de las calles; tejas, bardas caídas, techumbres completas arrancadas de tajo, estructuras de fierro y espectaculares derribados y semáforos desprendidos; de igual manera observamos las lámparas de luz de los postes rotas y desprendidas de su base, una gran cantidad de plafones, pedazos de metal, barrotes de madera, piedras, arena, lodo, entre otros. Fue prácticamente imposible transitar en vehículos los primeros días, por lo que los recorridos se realizaron a pie.

Conforme pasaban los días, la población comenzó a sacar de sus hogares, oficinas y negocios todos los artículos que habían sido dañados; entonces comenzaron a acumularlos sobre las ramas que seguían en el mismo sitio, no había servicio de recolección y se mezclaron los residuos verdes con otros tipos de desechos, incluidos los residuos peligrosos (rp) y los residuos peligrosos biológico-infecciosos (rpbi).

La autoridad no actuó de forma inmediata; pasaron semanas antes de que iniciara la limpieza de manera formal y organizada. Sin duda, el ejército mexicano y la Guardia Nacional desempeñaron un papel muy importante durante este desafortunado desastre. Fueron ellos precisamente quienes iniciaron las labores de despeje de calles. Se les observó quitar árboles y ramas que obstruían la vialidad, principalmente en la Costera Miguel Alemán y en otras vialidades alternas que conectan con las áreas turísticas; sin embargo, los desechos sólo fueron removidos hacia esquinas y banquetas.

De igual forma, esta misma actividad la llevó a cabo la sociedad civil; en sus barrios y en sus colonias se organizaron para limpiar sus espacios y sus calles. Los residuos fueron acumulados en espacios improvisados provisionalmente, otros más fueron llevados directamente a los depósitos temporales que tiene el ayuntamiento de la ciudad. Desde ahí el servicio de recolección se encargó de trasladar los residuos al depósito final: el relleno sanitario de Acapulco.

Las semanas transcurrían y los residuos cada día eran más y más. Así que no existió un solo sitio sin basura: la ciudad y sus alrededores se convirtieron en un enorme basurero; se podían oler y ver cientos de toneladas de basura de todo tipo, desde artículos de manejo especial, residuos peligrosos, hasta una gran cantidad de residuos verdes como troncos, ramas de árboles, entre otros.

El municipio se vio rebasado y no actuó de forma oportuna; la ayuda llegó más tarde. Los distintos municipios y el gobierno del estado de Guerrero se unieron con apoyo logístico para ayudar a resolver el problema de la basura. De igual forma, otros estados de la República mexicana enviaron ayuda de todo tipo, desde personal especializado, hasta camiones para atender el servicio de recolección de residuos, máquinas retroexcavadoras, bulldozers, camiones de volteo, entre otro equipo y maquinaria de apoyo.

Así, el martes 14 de noviembre de 2023, la gobernadora del estado de Guerrero informó sobre las tareas de remoción de escombro y limpieza y aseguró que se logró retirar en un solo día 667 metros cúbicos de azolve y escombros procedentes de las calles continuas de la Central de Abastos de Acapulco, una zona importante para la actividad económica de la ciudad.

El 16 de noviembre de 2023, a 23 días del fenómeno hidrometeorológico huracán Otis, la funcionaria estatal emitió un comunicado a través de su cuenta de Facebook informando a la población sobre las labores de limpieza que continuaban con la finalidad de retirar los residuos que aún se encontraban en calles y colonias del puerto de Acapulco, asegurando que el Instituto Guerrerense de la Infraestructura Física Educativa (igife) había retirado hasta ese momento 4 904.82 toneladas de azolve, basura y árboles en la colonia Libertadores, en la avenida del Quemado, en el Fraccionamiento Arboledas y en el acceso a los condominios Álamos y Pirules.

Este gran avance es muy significativo precisamente porque la población que vive en esa zona fue gravemente afectada por la fuerza del huracán y por el desbordamiento del río de la Sabana que provocó inundaciones a viviendas y comercios y daños a un gran cantidad de automóviles.

Por su parte, en esa misma fecha, 16 de noviembre, la alcaldesa de Acapulco informó que en las áreas que le fueron asignadas se habían recolectado 55 500 toneladas de desechos hasta ese momento, lo que equivale a la producción de tres meses.

2.4.1. Zonas específicas de recolección de residuos

Para llevar a cabo esta titánica labor, los involucrados, principalmente las autoridades, se tuvieron que organizar por sectores, implementando estrategias viables para que el proceso de la recolección se llevará a cabo de forma organizada y eficaz.

De acuerdo con los lineamientos establecidos en conjunto con la Federación y el municipio, se decidió dividir el trabajo de recolección de residuos sólidos y remoción de escombros. Para ese propósito, el gobierno del estado de Guerrero dividió el municipio de Acapulco en 14 zonas específicas, de las cuales seis zonas le correspondieron al gobierno del estado y las ocho restantes al municipio de Acapulco.

A tres semanas del siniestro provocado por el huracán Otis, el 15 de noviembre de 2023, el gobierno del estado informó que, con base en la distribución, la Zona 1 fue asignada a la Secretaría de Desarrollo Urbano, Obras Públicas y Ordenamiento Territorial (sduopyot). El personal de esta secretaría estatal ha atendido a colonias como Manguito, Barra Vieja, Cerro de Piedra, Amatillo, Agua Caliente, La Concepción, San Pedro Las Playas, entre otras más; se han limpiado 3.5 km de vialidades, las cuales ya se encuentran abiertas y con paso libre; se han intervenido 11 800 m² y recolectado 338 m³ de residuos y escombros, con un total de 630 toneladas diarias. Para esta actividad se utilizaron retroexcavadoras, camiones de volteo de 14 m³, un camión de volteo de 7 m³ y dos brigadas de 25 personas para llevar a cabo el barrido fino de las calles.

En lo que respecta a la Zona 2, correspondiente a la Secretaría General de Gobierno, integrada por 150 colonias y que abarca desde la Zona Diamante hasta el Crucero de Cayaco y San Pedro Las Playas, se han recolectado 4 455 m³ de residuos y escombros, lo que equivale a 3 427 toneladas, con un promedio de 336 toneladas diarias. Para lograr la efectividad y agilizar esos trabajos se utilizaron retroexcavadoras, una motoconformadora, ocho camiones de volteo de 14 m³, un cargador frontal y un grupo de 23 trabajadores.

El Instituto Guerrerense de la Infraestructura Física Educativa (igife) atendió la Zona 3, la cual comprende 80 comunidades y colonias populares, como El Limón, Barrio Nuevo de los Muertos, Dos Arroyos, Campanario, Kilómetro 30, Fraccionamiento Arboledas y la Central de Abastos. Para lograr los objetivos de esta actividad de limpieza, se conformó un equipo de 20 personas, tres retroexcavadoras, seis camiones de volteo de 14 m³ y dos camiones más de volteo de 7 m³, con lo cual se ha logrado recolectar 613 toneladas de residuos diariamente. De esta forma, desde que comenzaron estos trabajos, se han recolectado 4 904 toneladas de residuos sólidos, sedimentos y lodo.

Respecto de la Zona 4, también atendida por la sduopyot, los trabajos se concentran en las colonias El Retén, San Miguel y Vista Hermosa, priorizando las acciones de remoción y limpieza en el margen del río. Hasta el momento se ha logrado la recolección de tres toneladas de basura con el apoyo de un camión de volteo de 14 m³ y una cuadrilla de 35 personas.

A la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Guerrero (capaseg) le correspondió atender la Zona 5, que comprende las colonias Valle Encantado, Tuncingo y Rancho Viejo, entre otras. Para la remoción de los residuos, el personal utilizó nueve retroexcavadoras, 19 camiones de 14m³, 11 camiones de 7 m³, un cargador frontal 928G, un minicargador BobCat y cinco góndolas de 32 m³, lo que ha permitido recolectar aproximadamente 13 621 toneladas de residuos, equivalentes a 1 189 toneladas diarias.

A la Zona 6 le correspondió ser atendida por la Comisión de Infraestructura Carretera y Aeroportuaria del Estado de Guerrero (cicaeg). Esta zona comprendió las colonias Renacimiento, Zapata, Las Cruces, Paraíso, entre otras. Para los trabajos de remoción se contó con una cuadrilla de 50 personas, cuatro cargadores frontales, cinco retroexcavadoras, 11 camiones de 14 m³, 18 camiones de 7 m³, 1 camioneta F-450, una pipa para diésel de 5 000 litros, una pipa de agua de 10 000 litros, cinco camionetas pick-up, un tractocamión cama baja, un camión de volteo con remolque y una barredora autopropulsada. Con ese equipo se consiguió recolectar diariamente 2 428 toneladas de basura, con una recolección total de 27 669 toneladas hasta ese momento.

Las ocho zonas restantes fueron atendidas por el municipio en lo que resta de la ciudad de Acapulco y lugares aledaños. Saneamiento Básico Municipal retomó esas rutas para la atención de las colonias. Se adquirieron 50 camiones para reforzar la recolección y se rentaron 200 adicionales, los cuales trabajan en avenidas y calles como Diego Hurtado de Mendoza, Puebla, Baja California, Infonavit Alta Progreso, Chinameca y el predio de Firestone y Caleta esas ocho zonas que le correspondieron al municipio, se atendieron 11 sitios considerados como focos rojos de atención urgente; entre ellos, el área de Costera 125. En ese momento ya se habían recolectado aproximadamente 224 000 toneladas de basura y, junto con el trabajo del gobierno del estado en las 14 zonas habían sido recolectadas más de 300 000 toneladas de basura, es decir, lo equivalente a casi ocho meses de la administración (Costa Brava, 2023).

Durante la segunda y tercera semanas del fenómeno natural, se observaron camiones de otros estados de la República mexicana recolectando y retirando residuos y escombros, lo que permitió desalojar de residuos las vialidades, sobre todo la parte turística del puerto y los mercados 20 de Noviembre, Mercado Central y Mercado de la Laja. Sin embargo, el 9 de noviembre el gobierno federal anunció que daba por concluida la emergencia en Acapulco y Coyuca de Benítez, Guerrero, a través del Diario Oficial de la Federación (Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, 2023), pero el problema de los residuos aún no está controlado y mucho menos resuelto.

A 20 días del embate del fenómeno hidrometeorológico huracán Otis, las calles principales como la Costera Miguel Alemán, la avenida Cuauhtémoc, Farallón, La Cima, Y de la Laja, Constituyentes, así como las avenidas más importantes de las colonias de Acapulco, lucían con una cantidad exorbitante de residuos de todo tipo: las vialidades estaban completamente obstruidas con montañas de basura, lo que dificultaba el tráfico vehicular.

El espectáculo era dantesco y preocupante debido a las consecuencias que trajo consigo la gran cantidad de residuos que sobrepasaron las expectativas y la capacidad de respuesta del Departamento de Saneamiento Básico del ayuntamiento de Acapulco y del propio gobierno de Guerrero.

Son incalculables las toneladas de residuos que han sido depositados en las principales avenidas, los cuales se pudieron identificar de manera general y a simple vista para su clasificación, de acuerdo con la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (legepgir) (Presidencia de la República, 2023).

Por lo anterior, con la finalidad de facilitar la clasificación básica y general de los diferentes residuos acumulados después del fenómeno hidrometeorológico, se enlistaron los residuos que se concentraron en diferentes puntos de la ciudad, considerando su característica física común. Fueron identificados por tipo, clasificación, reciclable / no reciclable, así como por la disposición final que les dio el gobierno (cuadro 1).

2.4.2. Integración de nuevos equipos de trabajo para la remoción de escombros

En este contexto, la remoción de escombros y residuos continuaba y se integraban otros equipos al trabajo para hacer frente a la problemática. El 14 de noviembre de 2023, la gobernadora del Estado de México dio el banderazo de salida a 60 camiones de volteo, con destino a Acapulco, para sumarse a las tareas de remoción de escombros. Al mismo tiempo, en Guerrero, las autoridades correspondientes informaban a la población sobre los esfuerzos que se seguían realizando para dar respuesta y resolver el problema de los residuos.

Con la finalidad de contar con estrategias de recolección efectivas, los equipos fueron organizados a través de las distintas secretarías, como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Gobierno del Estado de Guerrero (semaren), la Secretaría de Obras Públicas del Estado de Guerrero y la Secretaría de Turismo Guerrero.

Por su parte, el ayuntamiento de Acapulco hizo lo propio a través de obras públicas, lo mismo que diferentes prestadores de servicios, voluntarios de la sociedad civil, incluido personal voluntario de la Universidad Autónoma de Guerrero. La Federación convocó a los jóvenes guerrerences a sumar esfuerzos, a través del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, para apoyar las labores de limpieza de barrido fino y sanidad del puerto de Acapulco.

La colaboración de la población en general en la recolección de basura ha sido muy importante; los habitantes de diversas colonias han participado activamente para limpiar sus espacios de una forma organizada y con sus propios recursos, de manera que las calles de sus colonias y sus barrios han quedado despejadas y limpias. Para la remoción de escombros y la limpieza de espacios públicos, como escuelas, iglesias, mercados, parques y playas, se llevaron a cabo invitaciones y convocatorias al público en general para que participaran en estas actividades.

Tipo de residuos	Clasificación	Reciclable / no reciclable	Disposición final	Observaciones
Residuos sólidos urbanos (rsu)	Inorgánicos Plásticos en diferentes presentaciones (pet, bolsas, etcétera)	Sí	Relleno sanitario Paso Texca	Se generó una gran cantidad de este tipo de residuos, incluidos los animales domésticos y de corral que perecieron durante el huracán. Se observó que estos residuos se encontraban revueltos.
	Orgánicos Cajas de cartón. Hojas de papelz Residuos de alimentos Residuos de origen vegetal como árboles derribados, ramas, palmeras Animales domésticos y silvestres que perecieron siniestrados	Sí	Relleno sanitario Paso Texca
Residuos de manejo especial (rme)	Residuos de construcción e infraestructura dañada, cascajo, metal, concreto, de mantenimiento y demolición en general Residuos electrónicos: cables y piezas de alumbrado eléctrico, de distribución telefónica y de televisión por clave, equipo electrónico y transformadores Aparatos electrónicos y electrodomésticos inservibles Neumáticos (llantas) usados Material pétreo (rocas, tierra y arena) Vidrio Piezas de tubería de distribución de agua y alcantarillado Postes de madera y concreto	Sí	Se desconoce	Este tipo de residuos requiere permiso de la autoridad competente (competencia estatal) para su disposición final. Se observó que estos residuos se encontraban revueltos con los desechos verdes provenientes de los árboles derribados; éstos, a su vez, fueron recolectados junto con la basura considerada como residuos sólidos urbanos.
Residuos peligros (rp) y residuos peligrosos biológico-infecciosos (rpbi)	Tanques de gas doméstico Alternadores (baterías) de automóviles Pilas para aparatos electrónicos Botes de aerosoles Recipientes de solventes Gasolina y aceite de automóviles Medicamentos diversos Trampas de grasa Sustancias químicas Objetos punzocortantes, como jeringas usadas, guantes de uso quirúrgico, cubrebocas usados, pañales sucios y toallas sanitarias usadas	No	Relleno sanitario Paso Texca	Este tipo de residuos, por su peligrosidad, debe tener un tratamiento y estar sujeto a un plan de manejo especial y a un destino autorizado, de acuerdo con el artículo 31 de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (legepgir), 2023) y la nom-087-Semarnat-SSA1-2002. Se observó que estos residuos se encontraban revueltos.

2.4.3. Depósitos provisionales

La gran cantidad de residuos que se generó por el huracán no fue posible transportarla de momento a su destino final, que es el único relleno sanitario con que cuenta la ciudad; por ello, con la finalidad de agilizar la recolección de esos desechos del huracán Otis, se instalaron en la ciudad cuatro puntos de almacenamiento provisional para acopiar los diferentes residuos. Esos puntos se ubicaron en la Costera Miguel Alemán, a la altura del Cici; en la segunda etapa del Infonavit se instaló otro; uno más en la calle Puebla de la colonia Progreso, y otro en el mercado de la misma colonia.

La presidenta municipal de Acapulco, en una entrevista con un medio local, el 2 de diciembre, señaló que se está trabajando día y noche con maquinaria y 200 camiones rentados y que se contratarán más unidades con la finalidad de reforzar la recolección de desechos, sobre todo para retirar la basura de los terrenos en los que se instalaron los centros de acopio de residuos. Aseguró que pronto serán retiradas más de 10 000 toneladas de residuos que permancen en dos predios (Costa Brava, 2023).

En la misma entrevista la alcaldesa de Acapulco afirmó que hasta el momento se han recolectado más de 300 000 toneladas de basura y prometió que en diciembre la ciudad se encontraría completamente libre de basura (Hernández, 2023b).

2.4.4. Problemática por tiraderos clandestinos a cielo abierto y quema de basura

Son grandes las extensiones de terrenos que están siendo invadidos por miles de desechos sólidos que arrojan arbitrariamente conductores de camiones de volteo y camionetas particulares, aseguraron los habitantes que viven en las zonas aledañas a esos tiraderos.

En denuncia pública a medios de comunicación local, los habitantes de las colonias Llano Largo, Colosio, Navidad de Llano Largo, la Poza y Puerto Marqués, comentaron que a raíz del huracán conductores de camiones de volteo y camionetas particulares están arrojando grandes cantidades de desechos y escombro en terrenos a cielo abierto, los cuales posteriormente son quemados, generando un problema de salud por la contaminación (figura 1).

Los afectados señalaron que han estado denunciando el problema de los tiraderos, pero las autoridades no han atendido su queja, dejando que el problema de contaminación se agrave. Al respecto, el director de Ecología y Protección al Medio Ambiente del municipio anunció la aplicación de sanciones en contra de quienes sean sorprendidos arrojando basura en la vía pública. Esta práctica se sigue realizando en distintos puntos de Acapulco.

2.4.5. Quema de basura

La acumulación de residuos y las altas temperaturas que aceleran el proceso de descomposición atraen fauna nociva como moscas, cucarachas y ratas, que aunado a la exposición de olores nauseabundos, ha exacerbado la gravedad de la contaminación. Así que la población ha optado por prenderle fuego a la basura, argumentando que falta apoyo por parte de las autoridades pues no hay camiones para retirar la basura de las calles. En consecuencia, los habitantes del municipio optaron por quemar la basura en las avenidas principales, como se observa en la figura 2 (la basura se encontraba frente a sus casas).

Esta práctica de quemar los tiraderos generó otros problemas graves; por un lado, se quemó la basura mezclada, donde había todo tipo de residuos, desde llantas de vehículos hasta tambos de plástico, los cuales son altamente inflamables; por otro lado, los tiraderos se ubicaban frente a edificios y casas habitacionales. Los vientos propagaron el fuego, el cual arrasó con esos inmuebles, postes de teléfono de madera, cableado y árboles.

La población, en su afán de limpiar, no tomó en cuenta estos elementos del contexto y, desde luego, el fuego se salió de control e incendió todo lo que encontró a su paso (figura 3).

Como era de esperarse, en esos enormes montículos de basura los incendios provocados por las personas estaban fuera de control y fueron los bomberos quienes tuvieron que intervenir en varias ocasiones para controlar y sofocar el fuego. Se deben considerar también las partículas tóxicas que se volatilizan en forma humo y cenizas y que contaminan el ambiente y afectan la salud humana.

De igual manera, los incendios de desechos sólidos en las calles continúan ocurriendo. El Departamento de Bomberos reporta un promedio de tres a cuatro incendios que atienden diariamente en distintos puntos de la ciudad. Los puntos de atención han sido la avenida Cuauhtémoc, las colonias 20 de Noviembre, Garita, Benito Juárez y La Mica, el bulevar Vicente Guerrero, la zona poniente y los poblados de Llano Largo, Altos de Miramar, Puerto Marqués y Dragos, la unidad habitacional El Coloso, y el fraccionamiento Costa Dorada. Debido a esta problemática ambiental, se observa una densa capa de humo que cubre la ciudad. El mismo fenómeno se observa en barrios y colonias (Hernández, 2023a).

2.4.6. Fumigación y rociado de cal a la basura como estrategia sanitaria

A pesar de los esfuerzos por atender la demanda de la ciudadanía, han pasado más de cuatro semanas desde el huracán y los servicios públicos municipales no han podido realizar la recolección de los desechos generados. Los tiraderos provisionales se hallaban fuera de control y sin ninguna restricción o vigilancia. Los pepenadores han desaparecido de los sitios en los que solían realizar la separación de las cosas que tienen utilidad para ellos.

Los olores fétidos se han apoderado de la ciudad debido a la mezcla de residuos de alimentos descompuestos y animales muertos. Ante esta problemática, las autoridades sanitarias fumigaban y rociaban con cal los residuos, específicamente donde existía mayor concentración. Se observó que esta actividad se ha estado realizando en distintos puntos de la ciudad, en las colonias Las Cruces, La Cima, La Y de la Laja, en la avenida Ruiz Cortines, en La Laja, en el Módulo Social Fovissste, en la colonia Progreso, en el fraccionamiento Las Playas y en la Zona Diamante, La Poza, la Unidad Vicente Guerrero, la Playa Bonfil, etcétera.

En la figura 4 se muestran imágenes de la aplicación de cal, para mitigar los riesgos sanitarios; sin embargo, ante las altas temperaturas, que oscilan entre 35 y 38 °C, ha sido imposible suprimir los malos olores y acabar con la proliferación de moscas, cucarachas y roedores.

2.4.7. Los asolvamientos

Regularmente el azolvamiento de calles y drenaje sanitario se produce como consecuencia del exceso de residuos sólidos que terminan en las coladeras. (figura 5).

2.4.8. Los sedimentos

Se documentó, además, sobre otro tipo de residuos que deben ser considerados para su manejo, como la gran cantidad de sedimentos de lodo, barro y arena provenientes de los arrastres de la zona media y alta del anfiteatro de Acapulco conocidos como Palma Sola, una colonia que se encuentra ubicada en las faldas del Parque Nacional El Veladero y el sitio donde se ubica la microcuenca de mayor extensión del anfiteatro de Acapulco, donde la población sufrió los embates de la naturaleza debido a que, por las fuertes lluvias y vientos provocados por el huracán, se desprendieron árboles y rocas que fueron arrastrados con sedimentos de tierra convertidos en lodos.

Este fenómeno trajo como consecuencia que se inundaran y azolvaran calles, casas y automóviles causando severos dañados económicos y a la salud. Amador-Díaz, Veliz-Lorenzo y Bataller-Venta (2015) plantean que la contaminación relacionada con los lodos sin tratar es una problemática ambiental debido a que estos residuos son altamente contaminantes por su contenido de materia orgánica, microorganismos y metales pesados.

En este sentido, los sedimentos representan un gran problema para la población, debido a que están acumulándose los montículos en las calles, que, al secarse, son dispersados por los fuertes vientos en forma de polvo, exponiendo los alimentos que se sirven al aire libre y comprometiendo la salud de la población.

Se constató que hasta la fecha existen montículos de sedimentos por toda la ciudad; otros más se observaron cubiertos de residuos verdes combinados con residuos diversos, lo que dificulta su remoción.

2.4.9. El sitio de disposición final de los desechos “relleno sanitario”

El relleno sanitario es el sitio del destino final de miles de toneladas de residuos que se han generaron debido al paso del huracán Otis. El tiradero se localiza a la altura del kilómetro 15 del tramo carretero Paso TexcaBajos del Ejido. En este sitio se depositan más de 7 000 toneladas de desechos diariamente; este alto volumen de residuos sólidos ha rebasado su capacidad.

En entrevista que realizó un medio de comunicación local a la encargada del sitio, el 18 de noviembre del 2023, ésta afirmó que son más de 700 descargas de camiones que reciben diariamente; aseguró que sin duda los residuos generados representan uno de los problemas ambientales más serios para la salud de la población acapulqueña.

Durante los recorridos que se realizaron al sitio del relleno sanitario se observó que el acceso se encuentra vigilado por personal de la Guardia Nacional la cual no permite el paso a personas desconocidas, al menos que cuenten con un permiso especial. Sólo permiten la entrada a camiones o camionetas que lleven basura al depósito.

A la distancia, se observó una gran cantidad de camiones pesados tipo torton, góndolas y volteo abordando su turno para descargar la basura, se observó incluso tráfico de camiones que avanzan a vuelta de rueda esperando su turno para poder llegar hasta la celda del depósito final de los residuos. Se pudo observar también maquinaria pesada, como trascabos que esparcen y compactan la basura (figura 6).

En este punto y las áreas aledañas de la zona prevalecen los olores fétidos. En el lugar se observa una inmensa polvareda que se levanta al constante paso de los camiones recolectores.

Antes del huracán ya existía el problema de recolección y disposición de los residuos. De acuerdo con esto, el Senado de la República (LXV Legislatura) (2023) advertía sobre el problema de la basura en Acapulco. El 11 de octubre, días antes del impacto del fenómeno natural del huracán Otis, ya se preveía el problema que existe por la gran cantidad de residuos que se generan durante los fines de semana y en temporadas vacacionales por la actividad turística en la ciudad. De acuerdo con esto, el representante del Senado exhortó al gobierno federal a coordinarse con el gobierno de Guerrero y del municipio de Acapulco para diseñar estrategias integrales que coadyuven a la resolución del problema de exceso de acumulación de residuos.

En este contexto, el ayuntamiento de Acapulco debe contar con un sitio de disposición final adecuado (relleno sanitario) que cumpla al 100% con la norma oficial mexicana nom-083-semarnat-2003, publicada en el Diario Oficial de la Federación (Semarnat, 2003). Se debe considerar instalar un centro de transferencia con la finalidad de separar cada tipo de residuo que ingrese al sitio, lo cual contribuirá a disminuir la cantidad de residuos que terminan en las celdas de captación, ayudando con ello a que el periodo de vida de cada celda sea más largo.

En entrevista con la encargada del relleno sanitario esta admitió que la celda número tres está a punto de llenarse y, desde luego, ya es insuficiente para los residuos que faltan de recolectar. Indicó que hasta ese momento sólo se había retirado una tercera parte de la basura, por lo que el relleno sanitario permanece abierto de día y de noche. De igual forma se recibe a los camiones en cualquier horario y se ha tenido apoyo solidario para la limpieza tanto de camiones como de personal de otros estados de la República mexicana. La encargada afirmó que para hacer frente a la enorme cantidad de basura, los tres órdenes de gobierno trabajan en un proyecto para la construcción de una nueva celda que cubra las necesidades existentes; para ello ya se contaba con los estudios técnicos de impacto ambiental y topográficos respectivos (Castro, 2023).

2.4.10. La limpieza de playas

La limpieza de playas se ha dejado a las autoridades municipales, quienes han priorizado la recolección en la franja turística de Acapulco; sin embargo, la franja de arena se encuentra completamente impactada por la gran cantidad de residuos que permanecían, a un mes del fenómeno hidrometeorológico huracán Otis (figura 7).

El 17 de noviembre de 2023, en rueda de prensa, los prestadores de servicios turísticos de la franja de Playa Icacos, Plaza Canadá, Plaza Francia y Plaza Costa Rica, plantearon la necesidad urgente de instrumentar un plan integral de rescate y limpieza de las playas de Acapulco. Advirtieron que el paso del huracán Otis, el pasado 25 de octubre, destruyó cimientos y escaleras de acceso a la playa, además de la gran cantidad de basura que arrojó el huracán a las playas. Los accesos se observan bloqueados debido a los residuos y a las ramas secas, mientras que la franja de arena se encuentra repleta de vidrios rotos.

Otis destruyó ventanales de hoteles y condominios junto al mar, lo que provocó que muchas playas no sean un sitio seguro para caminar o nadar. La Playa Icacos tiene una longitud aproximada de siete kilómetros que se extiende por la zona Dorada de Acapulco, desde la base naval de Icacos hasta el hotel Calinda.

Los prestadores de servicio turísticos de esta área son los que han iniciado con la limpieza y solicitan urgentemente que se les apoye con camiones recolectores para que se lleven los residuos de los accesos a la playa. Además, piden a las autoridades correspondientes poner en marcha programas de limpieza en todas las playas, debido a que los prestadores de servicios no se dan abasto con sus áreas de trabajo (Briseño, 2023a).

De esta forma, a más de 40 días del paso del huracán Otis, el 10 de diciembre de 2023, dio inicio la primera brigada de limpieza de playas en la que participaron alrededor de 300 personas convocadas por el gobierno municipal. Participaron los propios prestadores de servicio, trabajadores de limpieza y la sociedad civil. Dieron prioridad a las playas principales como Papagayo y Condesa y a algunos sectores de la Playa Icacos.

La alcaldesa del municipio explicó que las cuadrillas de limpieza, integradas por funcionarios y voluntarios, trabajarían desde la playa de Caleta hasta Barra Vieja, es decir, a partir de la zona tradicional de Acapulco, Zona Dorada, y concluirían con la Zona Diamante que comprende la playa de Barra Vieja. Los cooperativistas que también participaron en la limpieza resaltaron que lo más difícil fue el barrido fino y la criba de la arena, metro, por metro debido a la enorme cantidad de vidrios que permanecen en el área de arena.

Los escombros y la basura también deben ser removidos de las playas. En este sentido, esta actividad es encabezada por la alcaldesa de la ciudad a través de brigadas de limpieza y recolección de residuos en las playas principales, destacando el cribado de arena como principal actividad. La actividad de limpieza se estaría realizando los domingos. El equipo de limpieza cubriría distintos puntos de la zona turística de Acapulco (Briseño, 2023b).

Como parte de la estrategia de reconstrucción Fuerza Acapulco, la alcaldesa encabezó los trabajos de limpieza de las playas, acompañada de servidores públicos, prestadores de servicios turísticos, voluntarios de distintas instituciones, así como de la ciudadanía en general que se sumó a los trabajos del programa Jornada de Limpieza de Playas, en la cual participaron aproximadamente 500 personas, lo que permitió limpiar cinco puntos de la franja de arena de la bahía de forma simultánea.

En los accesos y las playas que fueron limpiados, Playa Papagayo, Playa la Condesa, Plaza Costa Rica y Playa Icacos, se continuará con las actividades de los domingos, con la finalidad de cubrir los diversos puntos de la franja de playa en toda la zona turística de la ciudad.

El 7 de diciembre, en entrevista con un medio local, la alcaldesa de Acapulco informó que hasta esa fecha se habían retirado un total de 19 000 toneladas de desechos sólidos, pues se limpiaron 22 accesos a las playas, lo que representan 75% del total (Hernández, 2023c).

El 18 de diciembre de 2023 el director de Promotora y Administradora de los Servicios de Playas, en rueda de prensa informó que hasta esa fecha se habían retirado alrededor de 8 000 toneladas de basura y desechos diversos de la zona de playa y la franja de arena que comprende desde el hotel Krystal, Playa Papagayo, hasta la ribera de El Morro. En este tramo se retiraron desechos de fibra de vidrio, pedazos de embarcaciones, aluminio de ventanas, cristales rotos, vehículos, fierros, troncos de árboles, escombros de construcciones, muebles, enseres domésticos y basura diversa. Comentó que hace falta intervenir las áreas de Revolcadero a Barra Vieja en la Zona Diamante (Briseño, 2023c).

2.4.11. Limpieza del fondo del mar y rescate de embarcaciones hundidas

Las embarcaciones destrozadas dentro y fuera del mar representan un importante problema ambiental de alto impacto que ha dejado el huracán. Embarcaciones de distintos tamaños fueron dañadas; otras más fueron destruidas y arrastradas al fondo marino dentro de la bahía de Acapulco. De igual manera se pudieron observar desechos cortantes como vidrios y fierros, así como escombros y basura de todo tipo.

Los fuertes vientos propiciaron el encallamiento de pequeñas embarcaciones pesqueras y yates de lujo en distintas playas de Acapulco. Se pueden observar principalmente en las playas Manzanillo, Honda, Malecón, La Marina, Club de Yates, Caleta, Caletilla y Puerto Marqués. Muchas más se hundieron en el mar. Así lo confirmó el titular de la Secretaría de Gestión de Riesgos y Protección Civil del estado de Guerrero quien confirmó que 347 embarcaciones aún permanecen en el fondo del mar pues fueron hundidas por las rachas de vientos de más de 300 kilómetros por hora que provocó el paso del huracán Otis.

El funcionario explicó que hasta ese momento (17 de enero de 2024) se habían localizado 435 barcos de distintos tamaños, de los cuales se han logrado reflotar 88. El resto permanece en distintos puntos de la bahía: “Algunas de estas naves están totalmente destrozadas y otras de gran calado no es posible sacarlas del fondo del mar” (Castro, 2024). De acuerdo con la capitanía de puerto, Acapulco tiene 7 000 embarcaciones, desde lanchas pequeñas hasta yates de lujo con registro oficial para navegar en las playas. De éstas alrededor de 700 sufrieron daños severos a causa del potente huracán Otis.

A tres meses del fenómeno hidrometeorológico las embarcaciones destruidas aún se hallan en los embarcaderos de las playas; los cascajos están empalmados en el muelle del Club de Yates y en el Zócalo de Acapulco. Al respecto, el director de Ecología y Medio Ambiente del municipio informó a un medio de comunicación local que ya existe un predio que el municipio destinó como astillero provisional, con una superficie de dos hectáreas y con capacidad para albergar de 70 a 80 embarcaciones, de tal suerte que, por reglamento, los propietarios de estas embarcaciones deben retirarlas de las playas y llevarlas a este sitio para su rehabilitación; sin embargo, a casi cuatro meses ninguna embarcación ha sido trasladada al lugar asignado, según el funcionario del municipio (Hernández, 2024b).

Dicho funcionario agregó, además, que las embarcaciones dañadas siguen en la zona de las playas antes mencionadas, por lo que se considera un grave problema ambiental el hecho de que permanzcan en los sitios donde fueron arrastradas por el huracán (Hernández, 2024a).

Se observan embarcaciones encalladas en la arena, entre las rocas y otras más en el fondo del mar, lo que representa un alto grado de contaminación visual por las propias embarcaciones encalladas y los residuos que forman parte de su estructura; además, hay contaminación por combustibles como el aceite y el diésel que utilizan estas embarcaciones, y acumuladores (baterías) y motores. Estas embarcaciones han liberado hidrocarburos tanto en la arena como en el fondo del mar, que sin duda son dañinos para la salud humana y, sobre todo, para la flora y la fauna marina. Asimismo, el huracán Otis arrastró y encalló en la zona rocosa de la Isla de la Roqueta tres embarcaciones de grandes dimensiones (figura 8), un barco petrolero con bandera de la república de China y dos remolcadores (Morales, 2023). A seis meses del fenómeno, las embarcaciones no han sido retiradas del lugar (Zárate, 2024).

Sobre la misma problemática el presidente de México reconoció que, a 80 días del paso del huracán Otis, aún hay 190 embarcaciones dañadas. Algunas están sepultadas bajo las olas, y otras en la arena, en las piedras o permanecen flotando (Vela, 2024).

Por otra parte, la Secretaría de Marina en la Ciudad de México dio a conocer en un comunicado de transparencia pública el censo oficial de 752 embarcaciones hundidas, así como 83 embarcaciones desaparecidas.

En este sentido, se puede deducir que las playas no sólo se vieron afectadas por la gran cantidad de materia orgánica que arrastraron las corrientes de agua, sino por todo tipo de residuos, desde muebles, enseres, animales domésticos, vidrios, entre otros, así como por la gran cantidad de embarcaciones de distintos tamaños que fueron arrojadas a la bahía y que a tres meses del fenómeno aun permanecían encalladas en las distintas playas de Acapulco (figuras 9 y 10).

De acuerdo con esas evidencias y la falta de una respuesta de atención inmediata ante un evento de esta intensidad, es evidente que en el caso del municipio de Acapulco, éste no cuenta con un plan para el manejo de escombros derivados de un fenómeno natural como fue el caso del huracán Otis, como una estrategia de respuesta para este tipo de fenómenos naturales, que destruyen gran cantidad de instalaciones urbanas, por lo que es posible que se tengan que demoler algunas edificaciones parcialmente destruidas y manejar los escombros derivados del desastre. Por lo tanto, es necesario que el municipio elabore un plan de gestión que establezca los procedimientos y las pautas para el manejo de los escombros ante desastres de manera coordinada, ambiental y económicamente responsable, como lo refiere la EPA (2008, 2014, 2018).

2.5. Conclusiones

El relleno sanitario ha rebasado su capacidad de captación de rsu. A pesar de que Acapulco ha tenido experiencias con fenómenos hidrometeorológicos como los huracanes Paulina, Íngrid y Manuel, el ayuntamiento no ha tenido la capacidad de implementar acciones ante los efectos de estos fenómenos naturales a través de protocolos y procedimientos adecuados que mitiguen y den respuesta al manejo de los residuos generados.

El manejo de los residuos sólidos urbanos y su disposición final ha sido un tema de debate y discusión por los expertos. Acapulco no se ha caracterizado por atender esta problemática desde antes de la presente administración. El fenómeno del huracán rebasó a las autoridades municipales y del estado debido a que no están preparadas para enfrentar un evento de esta naturaleza. Hoy en día se comprobó lo que ya se había previsto: la nula capacidad del sitio de disposición final de los residuos sólidos urbanos con que cuenta el municipio. El único sitio de disposición final con que cuenta Acapulco antes del huracán ya se encontraba saturado y se tuvo que improvisar para disponer de espacio para los residuos que se generaron durante el paso del huracán, lo que sin duda trajo consigo otras problemáticas ambientales por las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera, así como por los lixiviados que generan los desechos orgánicos.

La gran cantidad de residuos que se han producido por el fenómeno del huracán y su mala gestión mantienen a la sociedad acapulqueña en una constante preocupación debido a un evidente problema de salud pública.

El estancamiento de los drenajes por los residuos verdes ha provocado la proliferación de mosquitos generadores de la enfermedad del dengue; la falta de electricidad en la mayor parte de las colonias de la ciudad ha propiciado el consumo de alimentos en mal estado provocando diarreas y distintas enfermedades infecciosas; la insalubridad de los desechos sin duda impacta en las viviendas; los olores fétidos por la basura y la gran cantidad de moscas y roedores que se han apoderado de los basureros han provocado un gran conflicto social.

La problemática de los residuos en Acapulco ha sido rebasada; sin duda, es un tema que requiere atención y coordinación inmediata de todos los órdenes de gobierno. Se debe continuar con el apoyo de camiones recolectores de otros municipios y de otros estados para apoyar la recolección de residuos y subsanar la problemática de su manejo adecuado.

Desafortunadamente, las acciones implementadas en la gestión de residuos producidos por el fenómeno hidrometeorológico que se vivió en Acapulco fueron inadecuadas e inapropiadas; no se instrumentaron acciones contundentes desde la primera fase; los desechos se acumularon y se descompusieron en las calles y las avenidas principales de la ciudad y los residuos fueron removidos y tirados sin control alguno.

Finalmente, estas acciones crearán problemas ambientales a corto y mediano plazos que afectarán a la población en todos los aspectos, tanto de salud, como económicos y ambientales.